LA POSICIÓN DEL POSI SOBRE LOS IMPUESTOS Y LA FINANCIACIÓN DE LOS AYUNTAMIENTOS
Los ayuntamientos en España cuentan con dos vías de financiación: las transferencias que les proporciona el Estado y la obtención de recursos propios fundamentalmente a través de las tasas y los impuestos municipales.
A diferencia de lo que ocurre en otros países el porcentaje que destina el estado a las corporaciones locales es muy pequeño – alrededor del 14% del total -. Esto provoca que los ayuntamientos tengan dificultades para prestar servicios esenciales a los ciudadanos, incluyendo algunos que no entran siquiera dentro de sus competencias. Esta situación se agrava en un contexto de crisis como el actual y se agudiza aún más porque la Unión Europea impone un criterio de déficit cero a todas las administraciones que termina por asfixiar sus finanzas.
De hecho la concesión de recursos está sujeta a los dictados del gobierno – y estos a su vez a los de la UE - referentes al control de gasto o los límites en las contrataciones: si no cumples te encuentras sin dinero. El gobierno de Zapatero prometió articular un nuevo sistema de financiación para paliar esta situación pero al menos en 2011 no se va a llevar a cabo, lo que obligará a los consistorios a reducir aún más sus presupuestos y bloqueará su autonomía.
La mayoría de los ayuntamientos está gobernada por el PSOE o el PP y todos ellos se subordinan a las directrices del gobierno, que no son otras que las de la Unión Europea. Así que para cuadrar el círculo, los ayuntamientos recurren a soluciones como:
- La especulación inmobiliaria. Por medio de la venta de suelo público, de los ingresos por licencias de obras y los diversos impuestos reciben unos ingresos que son pan para hoy y el hambre de mañana porque una vez terminadas la obras, estos se convierte en gastos de servicios, mantenimiento etc. A ello hay que sumar que la especulación no es productiva sino que contribuye únicamente a encarecer el precio de la vivienda. Además, obviamente existe un límite físico de suelo urbanizable y el Ayuntamiento ya no tiene donde construir.
- La privatización. Uno de los objetivos que persigue la Unión Europea con esta política de asfixia consiste en liberalizar los servicios, es decir, privatizarlos, segregarlos. En Getafe la privatización se ha llevado por delante servicios esenciales como la limpieza (Lyma), las instalaciones deportivas, el cuidado de los jardines y hasta el cementerio.
- Eliminación de servicios básicos. Es el último y cada vez más frecuente recurso que plantean los Ayuntamientos para reducir los gastos. La excusa de que no les corresponde amenaza a diversos importantes servicios que hoy dan los gobiernos municipales.
- El aumento de las tasas. La izquierda política, el lugar donde se encuentra el POSI, defiende la recaudación de impuestos, fundamentalmente los directos, porque pueden ser más justos si se aplican con corrección. Los Ayuntamientos suben las tasas a los ciudadanos y lo hacen de una manera injusta ya que el incremento no es proporcional a la cota de ingresos sino que resulta igual o casi igual para todos. En nuestro pueblo el afán recaudador se dirige contra los trabajadores, que sufren una de los niveles impositivos más elevados en la Comunidad de Madrid – vados, Ecotasa… - en vez de dirigirse contra los distintos gobiernos autonómico y central. La tasa de los vados, por ejemplo, es obligatoria para todos los que dispongan una salida de carruajes con independencia de si es necesario o no para el propietario de la vivienda, como ocurre en el Sector III.
La Ecotasa tiene también su enjundia. La enorme variedad de impuestos llevó a incorporara la tasa de basuras dentro del IBI, la contribución. En un momento dado se vuelve a sacar de ese lote que, sin embargo, no disminuye. Y se pone como excusa que la UE exige que se cumpla el principio de que quien contamina paga y que por eso es necesaria esa nueva tasa. Ante la movilización vecinal se llegó a crear una comisión con agentes sociales y sindicatos – que la apoyaron – y que supuestamente debía velar por la reinversión ecológica de lo recaudado. Nunca se supo más de esa comisión. Lo que si sabemos es que a pesar de la oposición vecinal y de los recursos judiciales el Ayuntamiento implantó la tasa. Se da la paradoja de que en el Ayuntamiento de Madrid el PP también la aplica – aunque aquí ha prometido retirarla – mientras que el PSOE, que aquí la ejecuta con mano de hierro, muestra su oposición.
Mientras, se gastan cantidades importantes de dinero en financiar al Getafe (que ahora parece que se vende a un grupo inversor árabe) o en abusivos cargos y sueldos de confianza.
EL PROGRAMA ELECTORAL DEL POSI PLANTEA
- El aumento de la financiación municipal, por parte de la administración hasta llegar al 25% y que los impuestos guarden una relación directa con los ingresos y las propiedades de cada cual
- La retirada de la Ecotasa y la voluntariedad de pago de la tasa de vados
- Que se cobre a las empresas y los bancos y que paguen más los que mas tienen.
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